Esperan terminar el monoplaza lo antes posible y poder trabajar con él en los meses previos a las carreras
La temporada 2022/2023 está siendo para UVigo Motorsport una etapa de muchos cambios. Tras varios años con un equipo formado por entre 40 y 50 personas, este curso consiguieron renovar y ampliar considerablemente su cuadro de personal hasta alcanzar 71 alumnos y alumnas. Con este nuevo impulso, esperan poder adelantar todas las fases de diseño y fabricación y tener listo el monoplaza UM23 lo antes posible, para así poder rodarlo y testarlo con suficiente antelación respecto de las competiciones de Formula Student del verano. Precisamente, el pasado 27 de enero tuvieron lugar las pruebas de acceso para la mayoría de las carreras que decidirán en qué circuitos rodará el UM23, aunque la prueba española parece que seguirá siendo una cita indispensable para el equipo vigués.
El nuevo responsable de Organización y Márketing, Óscar Hermida, que toma el relevo de Sara Barbeito, explica que la etapa de diseño está prácticamente cerrada, «a excepción de pequeños detalles» y ahora se están ultimando los preparativos para comenzar con la fabricación. Después de dejar atrás las vacaciones de Navidad y una vez finalice la época de exámenes, el ritmo de trabajo se incrementará con el objetivo de «obtener un buen resultado en los exámenes de acceso a las competiciones del día 27 de enero».
Con la vista puesta precisamente en las carreras del próximo verano, reconoce Hermida que sobre las expectativas del equipo «solo podemos decir lo mismo que siempre, la expectativa número 1 es rodar, y rodar lo mejor posible».
Un equipo procedente de 21 titulaciones diferentes
El equipo actual, que debe diseñar, fabricar y competir con el UM23, está formado por 71 miembros (un 10% son alumnas) que proceden de 21 titulaciones diferentes. Tienen especial presencia las y los estudiantes de Ingeniería Mecánica (21), de Ingeniería Informática (12), de Ingeniería Aeroespacial (8) o Inteligencia Artificial (4) pero en UVigo Motorsport también hay estudiantado de titulaciones como Educación Social, Ingeniería de Organización o Administración y Dirección de Empresas. Además cuentan con dos asesores profesionales y 12 miembros asesores.
El hecho de contar con una base más amplia, esperan que los ayude a alcanzar uno de sus objetivos principales de cara a este año, que es «adelantar aún más todos los plazos y conseguir un monoplaza funcional lo antes posible, sobre el cual poder trabajar durante varios meses antes de las competiciones y así obtener el máximo rendimiento posible».
Por otro lado, los cambios en los plazos de diseño y fabricación sumado al hecho de que el número de miembros sea de casi el doble que en temporadas anteriores, implica necesariamente cambios organizativos, reconoce el portavoz del equipo. Lo más destacable es la creación de subdivisiones dentro de algunos de los departamentos más grandes, lo cual permite agilizar el trabajo. A ello se suma otra de las novedades, la implantación de una nueva plataforma de trabajo, que se convierte «en nuestro canal principal tanto para comunicación interna, para trabajar en línea de manera simultánea o para almacenamiento de documentos e información”.
Valoración de la temporada pasada
Respecto de la pasada temporada, en la que el equipo vigués competió en Hungría en el Formula Student East y en Castellolí en el Formula Student Spain, «la valoración global es muy buena». Hermida reconoce que, pese a que los resultados obtenidos en Hungría «no fueron los deseados, conseguimos que el UM22 haya superado las inspecciones mecánicas y de normativa, lo cual no se lograba desde 2019». Además, añade, «todas las valoraciones y consejos recibidos de los jueces, así como la experiencia de una competición real, nos permitieron llegar a la Formula Student Spain mucho mejor preparados». Así, tras unos ajustes finales, la segunda cita estival fue en el circuito de Castellolí, donde superaron sin problemas todas las inspecciones técnicas y mecánicas, así como las pruebas de seguridad del monoplaza, lo que les permitió finalmente rodar en la competición. «El UM22 ha conseguido acabar todas y cada una de las pruebas dinámicas, incluida la Endurance, una prueba de resistencia y fiabilidad que muy pocos equipos completan, y en la que alcanzamos un 5º puesto. En lo que respecta a las pruebas estáticas, cabe destacar el 3º puesto obtenido en el Business Plan Presentation, uno de los mejores resultados de la historia del equipo».
Formula Student Spain, un fijo en el calendario
De cara a esta nueva temporada, el equipo aún no ha decidido cuáles son sus preferencias en lo que a los circuitos se refiere. Con todo, reconocen que la cita con el Formula Student Spain es casi obligada, una competición en la que se sienten «como en la casa». A la hora de seleccionar una prueba internacional, la decisión es más complicada, apunta Óscar Hermida. «El año pasado quedamos muy contentos con la Formula Student East, por lo que no descartamos repetir, pero este será el último año que se celebre competición para coches de combustión en Alemania, y existe la posibilidad de participar en la Formula Student UK en Silverstone, que posiblemente es la competición más exclusiva; además, este año se celebrará abiertamente por primera vez la Formula Student Portugal. Nos gustaría poder asistir a todas, pero participar en una competición es muy costoso, por lo que cada año no nos podemos permitir participar en más de dos”.
El futuro pasa por el coche autónomo
En las últimas temporadas de la Formula Student el coche autónomo se fue abriendo paso hasta llegar a ser un requisito obligatorio, por ejemplo, en la FSG. Es por ello que el equipo vigués ha ido introduciendo estas características en sus últimos vehículos y, «aunque el UM23 aún no será completamente autónomo», podrá competir sin restricciones ni penalizaciones en ese aspecto. «Nos estamos preparando para el momento en que este cambio sea una exigencia», reconoce Hermida, y cada vez más sistemas del coche están diseñados para poder funcionar de manera electrónica. De hecho, uno de los mayores avances del departamento de electrónica este año, también «es conseguir implementar el protocolo de comunicación CAN-Bus, que será muy necesario para el futuro coche autónomo». En lo que se refiere a la autonomía del vehículo, para esta temporada los retos de UVigo Motorsport son principalmente dos: «conseguir un prototipo autónomo funcional y real y poder participar en una competición de coches autónomos”.
Fuente: DUVI
